El abrillantado de suelos es la solución ideal para superficies que se dañan debido al uso continuado que hacemos de ellos. Es un lugar transitado por personas de manera diaria y esto puede provocar que pierda el brillo poco a poco, motivo por el que el abrillantado de suelos es tan necesario. 

Mantener un suelo brillante es una tarea que requiere de productos especiales y profesionales. La forma de recuperar el brillo de la superficie es con trabajos de abrillantamiento y puliendo. Puede parecer el mismo concepto, pero se diferencian por la técnica y la maquinaria que se emplea.

Al tratarse de una limpieza algo compleja, la mejor opción es optar por una empresa profesional de limpieza que garantice un buen resultado. Limpiezas Garro trabaja con equipos cualificados y con productos de alta calidad para que el servicio que ofrecen tenga un resultado integral y profesional. Son especialistas en todo tipo de limpiezas y esto se debe a su gran experiencia en el sector. 

¿Qué es el abrillantado de suelos? 

El abrillantado de suelos consiste en cristalizar el mármol o el terrazo. Es un proceso que se basa en conseguir recuperar el brillo del suelo. El resultado depende del estado de la superficie, de los productos que se utilicen y de la maquinaria que se emplee en el proceso. 

El revestimiento, que es también como se conoce al abrillantado de suelos, busca reducir los poros de suelo para crear un mayor protección y brillo. Se utilizan máquinas rotativas que, junto a productos específicos, se consigue una cristalización de las sales y un endurecimiento del suelo.

Es por esto que debemos diferenciar entre pulir un suelo y abrillantarlo. La principal diferencia se da en el acabado que queremos conseguir y en el tipo de producto que vayamos a utilizar. Cuando pulimos un suelo, el objetivo suele ser igualar la superficie eliminando picotazos, rayajos… mediante máquinas pulidoras. Normalmente, pulir elimina el brillo del suelo y por eso suele ser necesario el abrillantamiento después, para recuperar el acabado que queremos.

¿Cuáles son los componentes ideales de un correcto abrillantado de suelos?

Para un correcto abrillantado de suelos debemos distinguir las tres fases y componentes que forman parte de este proceso. En primer lugar, se emplea un decapante de suelos que sirve para eliminar las ceras y resinas que existen en el suelo. Una vez que la superficie está mate y limpia de productos anteriores, se realizan las técnicas de pulido para igualar la superficie y se sella con un sellador para cerrar los poros y que no haya humedad en ellos ni infiltraciones. Por último, se utiliza un cristalizador de suelo que consigue el acabado brillante.

¿Qué suelos necesitan ser abrillantados?

Un abrillantado de suelo se puede aplicar sobre superficies como el mármol, la cerámica, el granito, la madera. Cada caso tiene unas características determinadas dependiendo del tránsito de las personas. Esto determina cómo de desgaste se queda una capa de pulido o de cera. 

Con el abrillantamiento y la cantidad de técnicas y productos que existen, se puede recuperar el brillo de los suelos. Es necesario realizar un mantenimiento tras el abrillantado ya que hay suelos que soportan mucho tránsito (por ejemplo, una tienda, o una estación de tren), otros que soportan poco tránsito (por ejemplo, una habitación de invitados en un hogar) y otros que no soportan nada porque son parte de una decoración.

Abrillantado de suelos de mármol

Los suelos de mármol pertenecen a clasificación de suelos pétreos. La manera sencilla de abrillantarlo es con una pulidora orbital de suelos ya que cuentan con diferentes placas diamantadas que se adaptan al tipo de brillo que se quiere alcanzar. 

La mejor manera para obtener un resultado perfecto es combinarlo con un producto que sea cristalizado de superficies. Si nos encontramos ante un suelo de mármol ya pulido, la forma de mantener el brillo es mediante la aplicación de una cera de protección. Esto creará una capa que protegerá el mármol, haciendo que se cierren los poros y que brille. 

Suelos de loseta

Los suelos de loseta requieren una buena limpieza para hacer que el brillo vuelva a aparecer. Estas limpiezas pueden ir acompañas de productos de limpieza especiales que incluyan cristalizado de suelo para aportar brillo y sellar los poros de la superficie.

Abrillantado de suelos de madera

Los suelos de madera suelen requerir una limpieza a fondo en la que se elimine toda la suciedad y posibles restos de tratamientos de suelo anteriores. Si el suelo de madera natural está desgastado, una de las opciones es sustituir aquellas piezas que lo necesiten, lijar las nuevas y aplicarles un barniz que garantice su brillo y conservación. 

El tratamiento que seguir para que el brillo permanezca es a base de encerrarlo. Esto es válido para los suelos de madera natural ya que en los de plástico que imitan madera no sirve. 

Suelos de mosaico

Los suelos de mosaico entran en la categoría de suelos cerámicos ya que se trata de cerámica tradicional que no cuenta con un recubrimiento grueso sobre el que se pueda hacer un pulido. Los más resistentes son aquellos suelos cerámicos que cuenten con un acabado mate.

La mejor opción para abrillantar un suelo de mosaico es mediante un cristalizador que permita destacar los diseños y colores de este. 

Abrillantado de suelos de cemento

El cemento es una superficie muy resistente. Es importante mantenerlo limpio para terminar con el polvo y que así la aplicación de otros productos sea efectiva, 

La mejor opción para mantener el brillo y acabado de un suelo de cemento, es mediante una limpieza profunda en la que se incluya un producto limpiador con amoniaco. 

Cada tipo de suelo necesita una técnica y un mantenimiento especial dependiendo del material del pavimento y la cantidad de tránsito y desgaste al que esté expuesto. Siguiendo los pasos y con la maquinaria adecuada uno mismo puede ocuparse del cuidado de su suelo pero al ser una tarea algo laboriosa, se recomienda contratar empresas profesionales para obtener unos resultados perfectos.